Ciudad de México 7 de octubre de 2020
Ahora cuál será el apoyo que recibirán más de 600 mil tabasqueños que están en el agua, cuestiona desde la máxima tribuna el país la legisladora federal
Señala que este fondo era una mano solidaria para miles de damnificados y un valioso apoyo para la reconstrucción de carreteras, viviendas, y llevar despensas y víveres a familias afectadas
La Diputada Federal por Tabasco, Soraya Pérez Munguía lamentó la ocurrencia del grupo parlamentario de Morena en desaparecer el Fondo Nacional de Desastres Naturales, que deja vulnerables a mas de 600 mil tabasqueños afectados en estos momentos por inundaciones.
Justamente ayer –dijo- el Comité Nacional de Grandes Presas confirmó que el gobierno del estado de Tabasco solicitó recursos del Fonden para atender a 8 de los 17 municipios damnificados. “¿Qué apoyos nos van a dar?, si acaban ustedes de votar a favor de la desaparición de esos recursos para ayudar a nuestras familias”, cuestionó.
“Y hoy subo a esta tribuna a defender el Fondo de Desastres Naturales, el FONDEN. Justamente hoy, que mi natal Tabasco está en emergencia, no me van a dejar mentir mis compañeros diputados federales de Tabasco que estamos aquí presentes, hay más de 600 mil personas en el agua”.
“El propio Gobernador declaró hace unos días en sesión permanente el Consejo de Protección Civil y publicó una declaratoria de emergencia para los 17 municipios del estado”, expuso al fijar su posicionamiento.
Recordó que el FONDEN siempre había sido una valiosa ayuda para la reconstrucción de carreteras y viviendas, pero sobre todo para llevar víveres, despensas, de manera solidaria para miles de damnificados.
Soraya Pérez indicó que no sólo es Tabasco, pues México está altamente expuesto a una gran variedad de fenómenos naturales y que cerca del 40% del territorio, y más de una cuarta parte de la población está expuesta a tormentas, huracanes e inundaciones.
Y es que indicó que la decisión de desaparecer 109 fideicomisos, que tienen reglas claras, cuyos recursos no pueden tocarse más que para el objeto que fueron creados, deja ver que la verdadera intención de que el gobierno no es combatir la corrupción, sino centralizar recursos para utilizarlos de manera discrecional y con enorme opacidad.
Dejó en claro que no será cómplice en la implementación de medidas económicas erróneas y dañinas para el bienestar de los mexicanos y ahora la gran incógnita es ¿para donde van estos recursos?